Rosa damascena flower water, Citrus aurantium amara flower water, Helichrysum italicum flower water, Glycerin, Aqua, Centella asiatica callus conditioned media, Kigelia africana fruit extract, Sodium Benzoate, Potassium sorbate, Citric Acid.

¿Es este un paso necesario?

Depende... si no te gusta usar muchos productos y sabes que no los vas a usar, puedes saltarte este paso y lavarte la cara con jabón, dejarla húmeda y seguir con el aceite facial. Sin embargo, al utilizar la Bruma Hidratante, obtendrá muchos beneficios nutritivos y curativos para la piel que se mantendrán durante todo el día gracias al aceite facial.
Lo habríamos creado si no contribuyera a ello.

¿Dónde encaja la crema en todo esto? ¿La necesito?

Técnicamente no la necesitas. Este producto se ha creado para ser utilizado en combinación con el aceite facial, por lo que ambas partes constituyen una formulación de crema rudimentaria, obviamente sin los emulsionantes, etc. Pero se obtiene la parte acuosa, que es la Bruma Hidratante, repleta de activos hidrosolubles e hidratación calmante de la piel, y luego se sella con el aceite facial, que contiene la parte oleosa de una formulación en crema, es decir, todos los componentes solubles en aceite, ¡lo que proporciona lo mejor de ambos!
Si aún así quieres utilizar una crema, por supuesto que puedes hacerlo. Póntela después de la bruma y antes del aceite facial.

¿Puedo sustituir la bruma por agua de rosas?

Puedes hacer lo que quieras y lo que creas que es mejor para tu piel. Por supuesto, el agua de rosas es una bonita alternativa por sí sola, pero no tendrá el mismo efecto que con la Bruma Hidratante porque no está supercargada con nuestros ingredientes activos.